Cuentos con mucho valor
Cuando era pequeña, muchas noches a la hora de dormir le pedía a mi madre que me explicase un cuento. Ella se sentaba al lado de mi cama y empezaba… “Había una vez…” Aún puedo recordar mi cuento preferido: “El pececito Glu Glu”. Seguramente de ahí mi vocación de maestra, pues el cuento narraba la historia de un pez que era maestro de un montón de pececillos. Y siempre le pedía el mismo cuento, de ahí que mi padre también le tocase leérmelo a veces y así darle un respiro a mi madre.
Con esta “personal introducción” me gustaría transmitiros la importancia que tienen los cuentos, no solo por el maravilloso momento que nos proporcionan de estar con nuestros peques de una manera única y exclusivamente para ell@s, sino también por la cantidad de valores que nos ayudan a transmitir.
A través de los cuentos, vuestros peques asimilarán de una forma más rápida, atractiva y práctica el significado de cada valor.
Os pongo algunos ejemplos:
– Los Tres Cerditos: esfuerzo, compartir, ingenio y prudencia.
– El Patito Feo: superación y tolerancia.
– Blancanieves: humildad, no tener envidia.
– Cenicienta: bondad, confianza y esperanza.
– Pinocho: amor, sinceridad, obediencia, responsabilidad.
– Caperucita Roja: obediencia, generosidad.
– La Bella y La Bestia: bondad, no juzgar por las apariencias.
– El Flautista de Hamelín: honestidad, honradez.
Seguro que en las librerías encontraréis un montón de títulos que os pueden ayudar a reforzar aquel aspecto que queréis trabajar con vuestro niñ@.
Compartir un rato de lectura con nuestros hij@s o explicarles un cuento inventado por nosotros mismos es uno de los mejores regalos que les podemos hacer. Y seguro que cuando sean mayores, lo recordaran con gran cariño.
“Y colorín colorado… Este escrito se ha acabado”.